La experiencia de muchos años y en múltiples centros de
trabajo, ha demostrado que para que un Programa Preventivo de Seguridad e Higiene
tenga éxito, es sumamente indispensable que cada supervisor, tanto de control
de producción, mantenimiento, control de calidad, etc. de toda empresa, se haga
responsable de la seguridad en su área de trabajo.
Lo anterior, implica que además de sus conocimientos
técnicos, el supervisor debe conocer a fondo las leyes, reglamentos, Normas Colombianas
en materia de seguridad y el propio Programa Preventivo de Seguridad e Higiene
a fin de apoyar en la observancia y aplicación correcta del mismo.
Sin embargo, aún existen supervisores que no están de acuerdo
con la idea anterior, consideran que la seguridad y salud de los trabajadores
es responsabilidad exclusiva del departamento de Salud Ocupacional o seguridad
industrial, y que su única responsabilidad es lo relacionado con la producción
o con los objetivos específicos de su área de trabajo.
¿Pero, acaso los accidentes de trabajo no afectan a la
producción? Consideramos que sí, y en un alto grado, ya que cuando ocurre un
riesgo de trabajo (accidente o enfermedad de trabajo), la mayoría de las veces
se afecta directamente a la producción, entre otras causas, por la pérdida de
tiempo del accidentado, por las interrupciones que causa el mismo accidente en
el departamento donde ocurrió; los daños materiales, al equipo y herramientas
de trabajo, y todos los gastos directos e indirectos, que elevan los costos de
los servicios o productos terminados.
Si los supervisores se preocupan por tener y mantener los más
altos rendimientos y productividad en cada uno de los puestos de trabajo, de la
misma manera deben dar a la prevención de riesgos de trabajo, igual o mayor
atención que la que dan a todos los aspectos relacionados con el cumplimiento
de los objetivos de su área de adscripción.
Además de lo anterior, el supervisor debe ocuparse de revisar
que cada tarea se realice correctamente y de acuerdo a los manuales de
procedimientos de operación, mantenimiento, instalación, etc. establecidos por
la gerencia, los cuales deben de cumplir con las normas de trabajo y reglas de
prevención de accidentes ya que hay que recordar que el hecho de que las
condiciones de trabajo se ajusten a las normas establecidas, no es suficiente
para eliminar los actos inseguros, sólo una evaluación constante ayudará a
mejorar las condiciones de trabajo.
Se tiene por hecho que un buen supervisor debe estar
consciente y a la vez convencido de que los accidentes de trabajo no se
presentan por casualidad, sino por la combinación de factores (ya sea actos
inseguros, condiciones peligrosas o ambos) y que de la misma forma que se
preocupa por la investigación e implementación de medidas preventivas y
correctivas cuando se presenta una avería en algún equipo o al presentarse
alguna falla en el proceso productivo, también debe implantar y mantener
actualizado un sistema de investigación y reporte formal de los accidentes y
enfermedades de trabajo que se presenten o cuando ocurra un riesgo de trabajo
al personal bajo sus órdenes y tomar las medidas preventivas adecuadas para
corregir las causas que los provoquen.
Toda vez que la productividad aumenta primordialmente por los
aspectos humanos y no tanto por la maquinaria o equipo de trabajo, ello no
quiere decir que el hombre este al mismo nivel que las máquinas o las
instalaciones, ya que todos sabemos que estas cosas son materiales, que después
de todo, para nada sirve la más avanzada tecnología si no hay hombres que las
operen, las reparen y las conserven en condiciones necesarias para su manejo,
por ello concluimos
de manera tajante que lo más importante para la producción o para cualquier
otra actividad en el centro de trabajo es precisamente el hombre.
Si aceptamos que los riesgos de trabajo que se generan en
toda industria sí afectan a la producción, esto significa que todo buen
supervisor, desde cualquier punto de vista, debe considerar como parte de sus
obligaciones diarias hacer lo necesario para evitar accidentes.
Los medios para alcanzar el objetivo de la prevención de
accidentes son muy variados, mencionaremos la capacitación y el adiestramiento,
investigación de accidentes, inspecciones periódicas en las instalaciones de la
empresa, juntas mensuales con la gerencia, reuniones con el personal
involucrado en cada departamento, etc. incluyendo, además, la responsabilidad
de fomentar una cultura adecuada y educación en seguridad e higiene del
personal bajo su control, definiendo las obligaciones y responsabilidades de
los trabajadores para con el Programa Preventivo que se implemente en la
empresa, el Departamento de Seguridad Industrial, servirá como asesor en la prevención
de riesgos y podrá colaborar con los supervisores en la planeación de
programas, efectuar sugerencias, realizar en coordinación de ambas partes las
visitas inspectivas, vigilar el cumplimiento de los programas, proporcionar
asesoría técnica en la materia, etc., pero definitivamente los únicos que real
y efectivamente pueden implantar y llevar a cabo con excelentes resultados el
Programa Preventivo de Seguridad e Higiene en cada departamento, son los
supervisores del mismo.
En conclusión, el supervisor es el elemento básico gracias al
conocimiento y a su experiencia práctica, así como por el contacto directo que
existe con sus subordinados y a la influencia sobre los mismos, ya que adquiere
una relevancia excepcional por ser el enlace entre los niveles directivos y
operativos, lo que implica estar en la mejor posición para la aplicación y
desarrollo del Programa Preventivo de Seguridad e Higiene, ante esto, debe de
poner todos los medios a su alcance y todo su interés para tratar de disminuir
las condiciones peligrosas.